Un tip esencial

Cuando pensamos en acampar, solemos imaginar mochilas repletas de equipo y objetos “por si acaso”. La realidad es que lo más necesario no es llevarlo todo, sino llevar lo correcto. Lo esencial para una experiencia segura y cómoda se resume en cuatro pilares: refugio, descanso, fuego y agua/comida. El refugio puede ser una tienda adecuada al clima, una lona impermeable o incluso una hamaca con cobertor. Dormir seco y protegido marca la diferencia. Para descansar bien, un saco de dormir y un aislante térmico son fundamentales, ya que el frío del suelo se siente incluso en noches templadas. El fuego o un hornillo portátil resultan imprescindibles no solo para cocinar, sino también para calentarse y sentirse seguro. Y finalmente, el agua potable (o un sistema de filtrado) junto con alimentos fáciles de preparar garantizan la energía necesaria durante la experiencia. Todo lo demás, como linterna, botiquín o ropa extra, es útil pero complementario. Si cubres esos cuatro pilares ya tienes lo necesario para acampar sin sufrir. En resumen, no se trata de cargar con media casa, sino de identificar lo que garantiza calor, refugio, comida y agua. Con eso, el resto fluye y la experiencia se disfruta de verdad.